Libertad. Sólo eso. ¡Quiero ser libre! No me pareció justo que me hayan bautizado sin mi consentimiento, que me hayan convertido en una oveja más de un rebaño inconsciente que ni siquiera se pregunta por qué debemos ir al infierno, por qué debemos creer en lo que nos dicen, por qué debemos mantener una tradición con un pasado oscuro solo coloreado de rojo sangre, por qué la Iglesia saca provecho en cada sociedad donde el numero de fieles sea mayoritariamente católico adjudicándose la representación social... una sociedad que en su mayoría no practica la religión y muchas veces se opone a ella (como es mi caso).
Yo tengo mi propia moral, no quiero que me impongan una, es por eso que tomé la decisión de renunciar a la Iglesia Católica. Hoy me llegó una carta del Obispado de Mar del Plata. Sólo me falta 1 paso:
"Se requiere, además, que el acto sea manifestado por el interesado en forma escrita, delante de la autoridad competente de la Iglesia Católica". Supongo que esa autoridad será la encargada de maldecirme señalándome con el dedo... y con mucho gusto le dedicaré la más amplia de mis sonrisas.
Bien, aunque me gustaría estar limpio del mundo religioso ya he sido tocado por él, por eso prefiero iniciar una nueva página, sin siquiera molestarme en decirles adiós.
ResponderBorrarSaludos y suerte con eso!!
Oremos mis infantes por detrás y por delante, todos desnuditos a los ojos del señor, se encargan mis hermanos, los perros del Vaticano de maquillar la mierda, que no llegue el mal olor ♪
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