martes, 26 de febrero de 2013

La injusticia del sistema



Comienzo por disculparme, como ya lo he echo varias veces, por mi anterior entrada. En ella se puede apreciar el problema que se desarrolla en mi mente. La intolerancia se mezcla con mi deficiente atención, y de ello resulta una entrada vaga, en donde ninguna idea llega a desarrollarse por completo. Sin embargo, quedaron en evidencia los temas que inquietan mi mente, y ellos son: la relación entre el pensamiento y la capacidad para expresarlo con libertad.

No en vano estos temas se presentan y entran en conflicto con mi rabia e intolerancia. Hace poco me he visto expuesto a situaciones injustas en las que mi orgullo y paciencia se han visto afectados considerablemente, haciendo de mi una persona desmotivada y autodestructiva.

Me echaron del trabajo. ¿La razón? Me desafiaron, y yo respondí al desafío. Todo eso derivó en la rabia de la encargada, y ante la impotencia no tuvo mejor idea que agarrarse de la única excusa que le pareció pertinente: una discusión que habíamos protagonizado el bachero y yo hace 15 días y que estaba completamente resuelta y superada.

En fin... Sin trabajo, pero con mi integridad egocéntrica, vuelvo a leer y a escribir, y así de a poco me voy reconciliando con mi personalidad. Sin embargo, el tema del pensamiento y la libertad sigue presente, y analizaré en la próxima entrada lo que resulte de mi estudio sobre éstas cuestiones.

LUCHA, EGO, RELACIONES DE PODER, LIBERTAD, VOLUNTAD, etc. Nada de eso es ajeno a este blog, y lo hago en entradas separadas sólo para no mezclar temas personales con análisis político-filosóficos.

Agradezco mucho la compañía de aquellos que, aún a pesar de mi inactividad, siguen por ahí. Espero me disculpen, pronto estaré leyéndolos como siempre.

Un saludo grande!

miércoles, 20 de febrero de 2013

La misma filosofía

Hola.
El otro día, conversando con una "humilde practicante de Tao", me contó la siguiente historia:

 Chuang Tzu habla acerca de un delineante de nombre Chu’i, que podía trazar círculos más perfectos a pulso que con la ayuda de un compás.  En realidad, el compás es necesario porque tienes miedo.  Si no estuvieses asustado, podrías trazar un círculo perfecto sin ninguna ayuda.
         En la naturaleza hay círculos por todas partes: todo se mueve en un sentido circular.  El círculo es el fenómeno más simple de la naturaleza, y no se necesita ningún compás.  Las estrellas no consultan un mapa; no llevan un compás para moverse en círculo.  Si les dieras compases y mapas, estoy seguro de que se perderían; no sabrían dónde ir ni qué hacer.
         Seguro que ya conocéis la historia del ciempiés.
        
         Un ciempiés camina con cien patas.  Una rana, que era un filósofo, vio al ciempiés, lo observó y empezó a preocuparse.  Con lo difícil que ya resulta caminar con cuatro patas, y ese ciempiés lo hacía con cien: ¡es un milagro!  ¿Cómo decidirá el ciempiés qué pata mover antes y cuál después, y cuál después de ésta?  ¡Y así hasta cien!  Así que la rana paró al ciempiés y le hizo una pregunta:         -Soy un filósofo y tú me dejas pasmado.  Eso me ha provocado un problema que no puedo resolver.  ¿Cómo caminas?  ¿Cómo te las arreglas?  ¡Parece  algo imposible!         El ciempiés dijo:-He andado toda mi vida pero nunca he pensado en ello.  Ahora que lo dices, me lo pensaré y ya te contestaré.         El pensamiento entró por primera vez en la conciencia del ciempiés.   En realidad, la rana tenía razón: ¿qué pierna tenía que moverse primero?  El ciempiés se quedó allí durante unos cuantos minutos, sin poder moverse, trastabiló y cayó.  Y le dijo a la rana:         -Por favor, no le hagas esa pregunta a ningún otro ciempiés.  He caminado toda mi vida y nunca había sido un problema, y ahora me has matado.  No puedo moverme.  ¡Y tengo que mover cien patas!  ¿Cómo me las arreglaré?

La vida se mueve realizando  un círculo perfecto… la vida se mueve de forma perfecta, no hay ningún problema.  Chuang Tzu dice que Chu’i puede trazar circunferencias más perfectas a pulso que con un compás.  Necesitas un compás porque no tienes confianza en la vida; necesitas  morales, preceptos, principios, biblias, coranes, gitas, para dirigirte porque  no tienes confianza  en la fuerza interior.  Así es tu vida.  Y todas esas biblias, coranes y gitas han provocado la misma situación en vosotros que la rana creó en el ciempiés.
         Demasiados preceptos que seguir, demasiados principios por los que regirse, demasiados conceptos morales.  Os habéis impuesto tantas cosas que vuestra vida interior no puede ser espontánea.  Os habéis extraviado, no a causa de ninguna fuerza maléfica, sino a cuenta de los bienintencionados.  No es un demonio el que os conduce hacia el error, son vuestros sacerdotes, vuestros líderes, esos a los que denomináis santos. "



Bueno, esta historia me pareció muy interesante, pero lo que más me sorprendió fue encontrar una similitud en la historia de "Veinte años después" (es el título de la segunda novela que conforma los tres romances sobre D'Artagnan). Y la historia dice lo siguiente:

Porthos, un hombre alto, fuerte, y un poco bruto, no pensó en toda su vida. El tiene que poner una bomba en un subterráneo para hacerla estallar. Lo hace. Coloca la bomba, prende la mecha, luego sale corriendo. Pero de golpe, se pone a pensar. ¿En qué piensa? Se pregunta cómo es posible que pueda poner un pié delante del otro. Entonces deja de correr, de andar; no puede avanzar mas... Todo explota, el subterráneo le cae encima. Lo sostiene con los hombros, pero tras un día, quizás dos, es aplastado y muere. La primera vez que pensó, murió. 
Al principio de esta entrada, quería poner en evidencia las similitudes de las historias, para luego determinar quién plagió a quién.. Pero en realidad, y como es obvio, las enseñanzas de Chuang Tzu se remontan al siglo IV a. C . Cuando "Veinte años después" fué publicado en 1985.

YO creo que el profundo sentimiento nacionalista francés de aquella época no se atrevió a admitir la influencia del Tao en su filosofía, y que la Revolución Francesa (1789 - 1799) sirvió para, además de muchos pros, como por ejemplo ese fuerte golpe a la monarquía absolutista, también promovió ideas de libertad que hoy en día se han transformado en los mecanismos que nos oprimen:

-La burguesía amplió cada vez más su influencia en Europa
-Se difundieron ideas democráticas, cuando todos sabemos que democracias verdaderas se cuentan con los dedos de una sola mano.

-Se fomentaron los movimientos nacionalistas