lunes, 18 de marzo de 2013

Hematomas y Hemorragias

Te voy a contar
Por qué no me conformo con nada
 
Tantas lágrimas derramadas en mi almohada
me han hecho flotar en un mar de desconfianza,
donde nadie hace lo que habla
La verdad se esconde tras la rabia
de corazones que no irradian
y han perdido la magia.
Desiluciones tempranas,
hematomas y hemorragias.

sábado, 2 de marzo de 2013

El progreso de la desigualdad

Hoy decidí desconectarme de todo, apagué los celulares, me fuí de mi casa. Estoy prácticamente aislado, y por fortuna llueve. Dormí hasta tarde y, después de desayunar, decidí dar un paseo bajo la lluvia. La lluvia no es muy fuerte, pero alcanza como para mantener encerrada en sus casas a la población. Recorriendo el barrio donde me encuentro, Santa Mónica, me puse a reflexionar por qué la gente le teme a esta hermosa lluvia. ¿Por qué, si llueve desde mucho antes que el ser humano apareciera sobre esta tierra? ¿Por que temerle a un fenómeno tan natural como la vida misma? Le tememos a la lluvia, a la noche, a la gente... No creo que falte mucho para temerle al día.
Así como la gente obedece a la otra gente, que no sale por que nadie sale, todos obedecen a la ley del dinero, en vez de obedecer a la ley que nos hace seres humanos: la fraternidad. La naturaleza de nuestro ser se sepulta cada vez más a medida que le damos más importancia al progreso. Es que la concepción de progreso cambió, y viene cambiando desde el siglo pasado. Se supone que  “ El progreso es un concepto que indica la existencia de un sentido de mejora en la condición humana ” Ahora díganme, dónde está esa mejora, si los valores que nos rigen se basan en especulaciones económicas y ocupaciones geoestratégicas. La humanidad se desprecia a sí misma, y muy por encima ha puesto a un pedazo de papel para que nos gobierne. Y luego me desconcierta la actitud de mis empleadores... Evidentemente, soy un necio.
El progreso, en cuánto a innovaciones tecnológicas y desarrollo social, ahora no sólo colisiona con un medio ambiente limitado, sino que se encuentra avanzando en contra de la naturaleza misma del ser humano. Hambre, muerte y destrucción. Basta con aplicar la idea de positivo frente a negativo: Si hay abundancia, sabemos que en el extremo opuesto hay sequía. Donde a alguien le sobran billetes, a otro le están faltando. La brecha entre las clases sociales aumenta cada vez más, a eso sí podemos llamarle progreso, el progreso de la desigualdad.
Si es verdad que la historia es lineal e irreversible, como lo afirman algunas corrientes de pensamiento, entonces estamos en el camino correcto y nos dirigimos hacia nuestro final. Pero si Hegel y su diálectica están en lo correcto, sólo espero ser testigo del cambio.