Notas sobre "Anatomía de la Melancolía" de Robert Burton.
Un epitafio en la tumba de Burton expresa que consagró su vida al estudio de la melancolía y murió a causa de la misma afección:
"Paucis notus, paucioribus ignotus,
Hic jacet Democritus junior
Cui vitam dedit et mortem
Melancholia."
Ob. 8 Id. Jan. A. C. MDCXXXIX.
"Poco conocido, y aún menos olvidado,
Aquí descansa Democritus Junior,
quien dedicó su vida y muerte
a la Melancolía."
Muerto el 9 de Enero, 1639.
Algunas definiciones de distintos autores que rescaté sobre ésta particular afección (y que figuran en el antiguo tratado) fueron las siguientes:
=> «los melancólicos son sujetos en los que la abundancia del humor maligno llamado melancolía o bilis negra causa tal trastorno que les hace perder la razón y desvariar en muchas cosas o en todas (
vel in omnibus, vel in pluribus) las que se relacionan con el discernimiento, la voluntad y otras actividades del entendimiento».
=> «una enfermedad muy maligna y pertinaz que hace degenerar a los hombres en bestias». (
Pessimum et pertinacissimum morbum qui homines in bruta degenerare cogit).
=> «una permanente angustia del alma (
angor animi) motivada por una sola cosa y sin acompañamiento de fiebre»
=> «se distingue del calambre, de la parálisis y de otras enfermedades análogas, así como de la demencia, en que la sensibilidad exterior y los movimientos están aquí abolidos más que alterados». (
Tolluntur in mania, depravantur solum in melancholia)
=> «generalmente los individuos de fino ingenio y gran despejo son los más expuestos a sufrir de melancolía» (
qui sunt subtilis ingenii, et multae perspicacitatis de facili incidunt in Melancholiam)
A modo de síntesis bien podría haberme quedado satisfecho con la siguiente afirmación:
"Así como los climas excesivamente fríos o cálidos tienen una influencia directa en la vida del
hombre, así también la melancolía de los padres influye en el carácter de los hijos.
Los más predispuestos a esta afección son los misántropos por naturaleza, los grandes estudiosos,
los amantes de la vida contemplativa, los poco activos."
Pero continué leyendo (por fortuna) y terminé por aclararme una duda que me viene aquejando hace mucho. Hasta llegué a preguntarle a personas de mi entorno, en una escala del 1 al 10,
qué tan loco creían que me encontraba. La respuesta fué alarmante... un 10.
Pero, retomando el comienzo de la anterior oración, leer lo siguiene me tranquilizó muchísimo:
"Erasmo pretendió excluir a los dementes de los distintos tipos melancólicos por ser en su mayoría
«sujetos alegres, exentos de ambición y de envidia, carentes de vergüenza y de temor,
libres de las preocupaciones que suelen agobiar a los demás en el curso de toda su existencia»."
Sin dudas me identifíco con esa caracterización, y una vez disipadas mis dudas con respecto a mi salud mental, puedo descansar tranquilo.
Al menos por ésta noche...
Wait a minute... ¿demente o melancólico?